De Dietrich, que ha obtenido recientemente nuevos éxitos que le proporcionan la oportunidad de un crecimiento sostenible, continúa su expansión internacional y ha cerrado, en China, el mayor acuerdo de su historia.
En virtud del acuerdo, De Dietrich entregará un sistema de tratamiento de residuos ácidos para una nueva planta de diisocianato de tolueno que se construirá en el noroeste de China. El diisocianato de tolueno (TDI, Toluen diisocyanate) se utiliza en la fabricación de poliuretano. El gobierno chino, que ha endurecido significativamente las normas ambientales del país, quedó impresionado por los procesos muy eficientes de tratamiento y depuración de efluentes de De Dietrich. El proyecto, que está programado que se complete en 2017, será el más grande jamás emprendido por De Dietrich y fortalecerá aún más a China como el origen más importante de las ventas del grupo.
De Dietrich también ha sido seleccionada para suministrar una unidad piloto completa para la primera empresa que empezará a fabricar ingredientes (o principios) farmacéuticos activos (API, active pharmaceutical ingredient ) en Bangladesh. El proyecto consta de seis unidades de reactor, un sistema de tratamiento de solvente, una unidad de calefacción y refrigeración, y sistemas automatizados. Ello permitirá que De Dietrich aumente aún más su ya fuerte presencia en el sur de Asia.
Según otra noticia relacionada con la industria farmacéutica, De Dietrich va a construir una planta completa de producción de antihistamínicos en España. Este proyecto llave en mano incluirá el propio edificio de producción, todo el equipo de reacción y separación necesario, y todo el equipo asociado. La producción de los primeros lotes se iniciará en el plazo de un año.
De vuelta en su país de orígen, Francia, De Dietrich acaba de firmar un acuerdo de asociación en pro de la “química ecológica” para equipar una plataforma de investigación para la producción de moléculas químicas a partir de cultivos oleaginosos renovables.
